Eso es casi metafísica.Si una persona no puede aguantar más por sus dolores o su vida espantosa (por ejemplo, el caso de Sampedro) me da la impresión de que no le dan vueltas. Y que cuando toman la decisión lo tienen bien claro.
Yo conocí un caso de cerca, de antes de esta ley, al que se lo facilitó una asociación, y lo tenía clarísimo. Sin duda alguna porque además eso era un delito entonces. No se quedaba nadie contigo a que ingirieras el veneno.Además por lo que yo veo de la ley se refiere a esos casos, a dolores insoportables, a enferemedades degenerativas, etc.
No es una cuestión de salud mental o no. Es algo muy diferente.
Es el estar condenado a una vida horrorosa y dolorosa y sin remisión alguna y que en todo cas irá a peor.